Este fin de semana hemos practicado un poco el arranque vacacional, después de bastante tiempo apalancados efectuamos una pequeña excursión por tierras de navarra para disfrutar del buen tiempo que para variar tuvimos.
Quedamos a las nueve de la mañana con amigos del colegio de los nenes y nos dirigimos a visitar La Foz de Lumbier, un estupendo sitio para pasear, ver el paisaje, los buitres leonados y la curiosidad de andar por los viejos túneles del ferrocarril.
Para las 11 de la mañana ya estábamos en la zona. Al llegar al sitio hay un aparcamiento donde dejar el vehículo, el precio de este año es de 2 euros y lo puedes dejar todo el día. También hay baños, merenderos y agua lo cual es importante en días de calor. Durante el recorrido también hay una fuente que ayuda a refrescarte en el camino, una vez pasados los túneles y andado un poco.
La tropa se lo pasó cañón con las linternas en los túneles. Además vimos unos cuantos buitres sobrevolando la zona, no se llevaron a ningún niño.
Para la hora de comer ya habíamos terminado el recorrido y como estaba el sol radiante en vez de quedarnos a comer por allí nos dirigimos al Castillo de Javier a comer.
Llegamos al lugar y nos metimos en unos locales que tienen preparados para comer dentro con mesas y sillas. El sitio estupendo, con la sombra de los árboles. Los bocadillos nos sentaron a gloria y después unos cafecitos y relax.
El sitio está muy bien preparado, con campas, bares, restaurantes, hotel y el Castillo. Estuvimos luego ya a la tarde visitando el Castillo que está bien, estuvimos entretenidos con los nenes por el castillo y luego ya de recogida.
Quise enseñarles ya que estábamos allí los sumideros del embalse de Yesa que impresionan pero estaba de obras así que ya inciamos la retirada a Vitoria.